Este monumento, que será removido por la municipalidad más adelante del mismo paseo, será la primera obra monumental que se exhibirá al llegar a esta ciudad por lo que su mantenimiento de sus estructura, corroída por el tiempo, está siendo devuelta a su normalidad.
El plan de rescate de los considerados monumentos municipales, está siendo considerado como de importancia capital, ya que el resplandor que se siente en la población romanense, ameritan que estas estén debidamente representadas para que sirvan de fuente cultural a esta generación que cada día se interesen por las cosas de sus pueblos y añoranzas para aquellos y aquellas personas vieron en un paso, estos objetos y personalidades en su diario vivir.
La primera locomotora del Central al Central Romana, el monumento al Padre Abreu, la Plaza de la Medalla Olímpica, el Paseo Sagrario Díaz, la plaza al Profesor Juan Bosch, la plaza de las Banderas, el Paseo de los Inmortales del Beisbol Latino, el monumentos a Héctor P. Quezada entre otros, son manifestaciones históricas culturales que deben perpetuarse con el tiempo y su mantenimiento y atención a los mismos deben ser de primera calidad y continuamente.
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