NAGUA.- El lanzador de Grandes Ligas Ambiorix Burgos se declaró inocente de haber causado la muerte a Josefina Minaya Martínez y Anjeli Faña en un hecho acaecido el 30 de septiembre en la carretera Nagua- Cabrera. “Soy inocente...., voy a salir bien de este caso porque no he cometido el hecho que me están imputando”, dijo seguro de sí mismo Burgos, dueño de una poderosa recta, pero que no ha podido establecerse en las mayores.
Burgos, quien ha pasado gran parte de este año recuperándose de una cirugía en su brazo de lanzar, declaró que con él “se está cometiendo una gran injusticia”. Reveló que durante los interrogatorios que le practicaron numerosos fiscales fue presionado para que admitiera que él era el responsable de haber causado la muerte de Minaya Martínez y Faña.
En una entrevista exclusiva concedida a EL DEPORTE de LISTÍN DIARIO, Burgos dijo que es objeto de persecución de parte de un sector que no identifica, porque asegura que la persona que cometió el hecho fue su primo Edwin Silverio Sánchez Marte,que iba conduciendo la poderosa jeepeta Hummer propiedad del pitcher de los Mets de Nueva York.
La misma es de color blanca, placa estadounidense número 313KMX, y se encuentra parqueada en el patio de la fortaleza Olegario Tenares, donde Burgos guarda prisión junto a otros cuatro reclusos.
“Espero salir bien de esto y voy a seguir adelante”, comentó Burgos, quien tiene la convicción de que mucha gente lo apunta con el dedo acusador “por envidia”.
Cuando se le preguntó sobre las razones que tuvo para haberse entregado nueve días después del accidente declaró que lo hizo “por razones de seguridad”. A seguida comentó que familiares de una de las fallecidas merodearon la casa donde residen sus padres y hermanos y que uno de ellos estaba armado.
El padre de Burgos, el señor Pablo Burgos, contó que en esa oportunidad su hijo menor tuvo que saltar la verja trasera de su residencia para evadir al pariente de una de las fallecidas.
Se mostró extrañado porque se le quiera acusar y se este encarcelado por un hecho que no cometió y que la persona que se ha responsabilizado del hecho se halla en libertad. “Es a mí que me quieren, no sé porqué, pero es a mí que me quieren”, siguió diciendo Burgos, quien dice que venía en la parte trasera del vehículo que era conducido por su primo Sánchez Marte.
El relevista de la organización de los Mets negó reiteradamente que estuviera enamorado de una de las fallecidas y que al momento del accidente estuviera persiguiéndola, como se ha dicho.
“No conocía a esa mujer..., cómo la iba a estar siguiendo acompañado de mi novia”, comentó Burgos, quien se veía seguro de lo que estaba diciendo.
UNA NOCHE TRANQUILA
Burgo dijo que pasó la primera noche en la cárcel tranquilo. “Dormí bien..., he comido bien y me siento tranquilo”, relató. Su almuerzo ayer fue pescado, arroz, habichuela con ensalada.
Estaba vestido con una “T-shirt” negro con un dibujo plateado en el pecho, un pantalón corto y unos tenis negros con líneas rojas.
La entrevista se produjo en la oficina del Alcaide de la cárcel pública de Nagua, Oscar Darío Quiñónez y en la misma estuvieron presentes sus abogados Carlos Florentinos y Bienvenido P. Aragonés, así como oficiales del Ejército Nacional.
La entrevista con Burgos fue lograda después de una espera de más de tres horas y luego de llenar varios trámites, incluyendo autorizaciones de la Fiscalía, sus abogados, la Dirección General de Prisiones y hasta del propio jugador que no había hablado del caso.
Busgos ha recibido la solidaridad de peloteros, especialmente compañeros de equipos, así como de los ejecutivos de los Mets y de su agente Domini Torres.
También recibió llamadas de un abogado del Sindicato de Jugadores de Béisbol de las Grandes Ligas, cuyo nombre no recordó. Dejó abierta la posibilidad de recibir asistencia de este.
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